Un paisaje sorprendente, onírico, surrealista y único en Europa.
Es difícil imaginar, cuando se visita este paraje tan singular, que en aquellos tiempos, Antequera estaba en la línea de playa y Málaga cubierta por el mar.
El origen de esta extensión de 17 kilómetros cuadrados tuvo lugar durante el periodo jurásico hace aproximadamente 150 millones de años. Los materiales depositados en el mar emergieron como consecuencia del plegamiento alpino, conservando buena parte de su horizontalidad a pesar de haber ascendido más de 1.000 metros sobre las aguas.
Más tarde, una serie de fracturas generaron grietas (diaclasas) y sistemas de fallas. La erosión de dichas grietas ha producido lo que llamamos hoy día callejones o corredores, formándose en su intersección hoyos o dolinas (sinónimo de Torcas, de ahí el nombre de la sierra).
A partir de este momento el conjunto queda sometido a un proceso de erosión característico: el modelado cárstico.
La erosión de la roca por la acción del agua helada (gelifracción), junto con la disolución de las distintas calizas, por ataque químico del CO2 atmosférico, presente en el agua de lluvia, han modelado multitud de formas en las rocas, produciendo un verdadero museo de esculturas naturales.
A través de las rutas turísticas por las que el visitante se puede adentrar en sus entrañas, misteriosas figuras surgen del conjunto. Toda una combinación de fantasías convertidas en realidad por medio de las piedras calizas.
Se aconseja visitarlo cuando la temperatura no sea muy cálida ni cuando haya mucha niebla para poder admirarlo bien, pero si os gusta imaginar en un día de niebla... las historias pueden ser sugerentes...
No, no estoy de vacaciones, pero quizás por eso repaso otras que tuve y las muestro; porque existe variedad en verano, y no todo es playa, piscina y agua en definitiva.
A Fackel.
31 comentarios:
Son muy sugerentes, Isabel. Sin duda debió de resultar maravilloso -y hasta algo inquietante- poder pasear por este bosque petrificado de máscaras.
Un beso grande!!
Gemma, me alegro te gusten y ya sabes que puedes disponer de ellas. Hemos hecho tres viajes en varias ocasiones a ese paraje tan distinto porque está cerquita de aquí y tengo luces diferentes de cielos y piedras.
Muchos besos para ti también.
La naturaleza es sorprendente y preciosa. Las fotos de otros viajes siempre está bien tenerlas a mano...
Por si acaso no lees que te he contestado en mi blog, te cuento aquí que me alegro de que te guste el cambio de apariencia.
Es verdad lo que cuentas de acercarnos un poquito con estas historias...
Un abrazo y gracias
El primer "caradura" parece que esté besando a alguien que se fue y le dejó así. :-)
Me ha interesado lo que cuentas, es un lugar sorprendente y bello.
Besos (también al caradura que alguien dejó plantado)
He estado en dos ocasiones en el Torcal, es muy divertido lo que sugieren sus piedras, es algo que hago en montañas que se prestan a imaginar lo que pueden significar sus formas y relieves.
Besos Isabel
Recuerdos veraniegos que refrescan las largas tardes de sol.
Gracias por la estampa, un beso
Interesantísimos los datos que das e impactantes las imágenes.
No conozco El Torcal, y mira que he pasado muchas veces cerca de Antequera. Con tu información -que desconocía- , intentaré verlo cuando vuelva por aquellas tierras andaluzas.
Qué cosas, Málaga no existía en el Jurásico y el mar llegaba hasta Antequera...
Me ha gustado mucho esta entrada, Isabel. Como dices, en verano no todo van a ser playas.
Un beso.
Tomo nota de Antequera para cuando ande en la zona. Todas las fotos preciosas pero esta última ¡¡me encantó!!
Feliz verano igual, Isabel, aunque no estés de vacaciones. Un beso.
son buenas las fotos, estupendas visuales
El Torcal impresiona desde lejos y desde cerca te envuelve...
Besicos salados
Soy también un enamorado de esas formaciones rocosas, Isabel. Allí, como en las peñas de Los Barruecos, en Malpartida de Cáceres, o en la Ciudad encantada de Valdecabras, en Cuenca, sentimos el tiempo geológico, ese tremendo devenir, esa terrible languidez de nuestro planeta.
Viendo las piedras, siento/pienso que somos muy jóvenes e inexpertos.
Un abrazo desde el origen***
Lugares sorprendentes, mágicos. Me gusta mucho que lo hayas colgado, lo conocía de reportajes y fotos, pero con esta entrada me has dado mejores motivos para visitarlo.
Un abrazo, Isabel
Interesantes los datos y las fotografías. Una información estupenda y oportuna, para ser compartida con blogueros fantasiosos, como es el caso.
Abrazos.
Muchas gracias, Isabel, por ese recorrido petreo y toda esa informacion que ignoraba (y disculpa la ortografia desde este ordenador prestado). Me encantaria verlo y tocarlo algun dia. Un abrazo y que tengas muy buen verano, con o sin vacaciones!
Hola, Isabel. Un gran aperitivo este del Torcal: entran ganas de visitarlo, sin duda.
Con permiso sigo paseando por tu blog.
Saludín.
Paisajes espectaculares, gracias por compartir, me voy de vacaciones hasta primeros de Septiembre,
que tengas una feliz semana.
un abrazo.
Me encantó el título, y me arrancaste la sonrisa. Y disfruté de este paseo que nos ofreces. No conozco estos parajes, pero apetece visitarlos a través de la mirada que nos brindas.
Besos, Isabel.
Preciosas fotos y detallada explicación que nos da de este lugar.Hace tiempo que me lo comentaste y su visita quedó anotada. Espero ir por este fantástico lugar cuando refresque y pueda extasiarme en su contemplación.¡Necesito ya conectar con la Naturaleza! Besitos.
Isabel. Me dejas boquiabierto. Se ve que es una preciosidad y pienso ir algún día a verlo. A mi no me cuesta mucho imaginar los lugares cubiertos por las aguas. Donde vivo es un valle, suave, apenas unos cerros que delimitan el nivel antiguo, todo muy erisonado, pero me recreo en imaginar las aguas hace equis períodos. Parece mentira que lo que es producto de la destrucción, el desgaste, el alzamiento y los repliegues sea objeto de nuestra percepción como BELLEZA. Eso nos conecta con esa geología, con esa naturaleza anterior a nuestra presunción y soberbia. Debe ser por una razón análoga por lo que nos gusta tanto sentirla cerca, porque nos empequeñece y la sentimos madre.
Gracias, gracias por el texto, las fotos y tu dedicatoria. Me enterneces. Un beso.
Querida Isabel. He ido postergando un día y otro el comentario y de hoy no pasa.
Había oído hablar del Torcal de Antequera pero no había visto fotos y me han encantado las suyas. Y las explicaciones sobre su origen y desarrollo.
Y me ha encantado ese guerrero guardián en piedra de la primera foto. Jajaja, ya veremos si la MegaMaga Gemma no hace un micro sobre él.
Y, por último, me ha encantado la dedicatoria a La Antorcha... ¡Bieeen!
Un abrazo grande, costurera.
Siento el retraso en contestar vuestros comentarios. Ahí voy:
Lucia, tú misma al poner las fotos de Lisboa me recordaste esa mágica ciudad, también merece la pena escribir sobre ella. Ahora, gracias a la técnica podemos guardar todo lo que vamos conociendo.
Otro abrazo y gracias a ti.
Elvira, ese lugar se presta a todas las interpretaciones posibles, me gusta la tuya.
Un abrazo.
Pilar, ¿qué no habrás recorrido tú? da gusto visitar todos los lugares que nos muestras en tu blog, y que tan bien nos explicas con tu sabiduría sobre la naturaleza. Más besos para ti.
Musaraña, gracias a ti, y besos.
Isabel, eso pretendía: variar las opciones que nos dan hasta la saciedad, para quien tenga posibilidad de viajar, aunque hace calor, están cerca también los montes de Málaga para respirar.
Besos.
Myriam, me alegro y espero te guste como a nosotros.
Gracias por tus deseos y besos.
J.G., se lo diré al fotógrafo. Es importante porque es la opinión de un experto.
Gracias por pasar.
Cabopá, se nota que lo has visitado, es una de las sensaciones que se experimenta.
Besos.
Juan Antonio, tomo nota, de esos otros sitios para cuando tenga ocasión. Me gusta mucho cómo lo describes.
Gracias por compartirlo.
Ofelia, tomamos nota de nuestra pequeñez y volatilidad, es lo que más me impresiona, ellas son las que nos cuentan...
Otro abrazo para ti.
virgi, aunque a mí lo poco que he visitado de los tuyos me impresionaron muchísimo, reconozco que este lugar me dejó boquiabierta.
Yo espero completar mi visita a tus islas en alguna ocasión, igual nos cruzamos, jeje...
Muchos besos.
Susana, te ofrezco también la imagen de la fantasía para que con tu arte nos cuentes y soñemos.
Sería estupendo.
Un fuerte abrazo.
Bel M., me alegra te guste y también te deseo un verano agradable. Gracias y besos.
leo, puedes pasear todo lo que quieras, me encantan las visitas y vuestras opiniones. Besos.
Ricardo, te deseo unas felices vacaciones en el lugar que hayas elegido. Hasta la vuelta.
Zarzamora, qué bien, arrancarte una sonrisa, me alegro como que te guste el lugar.
Un abrazo.
emege, que te pases por aquí y que te sorprenda el lugar a ti, empedernida viajera, me alegra mucho, lo sabes.
Abrazos de recuperación.
Fackel, así me quedé yo cuando contemplé ese lugar tan irreal, sobre todo cuando lo invade la niebla.
Me gusta cómo describes ese valle suave, imagino que te relajará su contemplación de tanto devenir humano como el que nos invade y tanta intolerancia.
Me alegra mucho que te haya gustado.
Un abrazo.
Freia, querida, yo también ando ocupada y tengo ganas de visitarte con tiempo porque de tu espacio aprendo yo mi asignatura pendiente: la música, y las bellas descripciones con que acompañas su explicación.
¡Qué bien, que te guste todo!
Es un placer encontrar amigos entre nuestras sentidas palabras.
Un fuerte abrazo.
Un paisaje fascinante. Digno de cuento.
Saludos!!
Se encuentra uno con tantas cosas bellas en la naturaleza que retratas.
La verdad es que esa niebla da para muchas historias.
No lo conocía, es un paisaje precioso. Sugerente y está ahí al lado.
Un abrazo
Lo apunto, Isabel, para el otoño o para cuando sea.
Saludos
Ladelmedio, seguro que tú bordarías uno.
Gracias y besos.
Vero, ya me gustaría a mí ver el dibujo que crearías, tan original y fascinante como los que acostumbras.
Un abrazo.
Elena, me alegra descubrírtelo. Tú también verías historias fantásticas en esos recovecos.
Otro abrazo para ti.
José Luis, es una mina para las fotos este paisaje, no querrías salir de allí.
Saludos.
Amiga, disfruto tu escrito y las buenas fotos.
He recordado un pateo que hicimos por el interior del Torcal,más de diez horas, con mi grupo de andariegos. Mágico, cierto. Montón de fósiles marinos. Bello. Esta Andalucía tiene de tó.¡¡ Besos de UVA
Uva, me alegro de que pases por aquí; faltabas tú, que también eres una buena andariega. Aunque están muy bien los diferentes senderos, según la epoca que escojamos, recorrerlos cuesta.
Besitos.
Publicar un comentario