Todo con mayúscula.
En el sur y en la llanura del interior no se ha podido tomar sin riesgo de quemarnos.
Pero ahí están ellas, las libélulas.
Ni porque me acerque a tender la ropa se van, me acompañan y puedo apreciar su belleza.
Les encanta subirse a la horqueta que formamos con varias cañas secas para elevar el cordel.
Más: https://es.wikipedia.org/wiki/Anisoptera