Siempre hay que recordar que no hace falta aprender lo que uno ya es capaz de juzgar. Por tanto, si sólo se quiere juzgar, ya no se puede aprender nada más.
Rudolf Steiner
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El hilo que conduce al costurero te llevará al lunes 10 de Septiembre de 2007.
20 comentarios:
Yo quiero hacer las cosas bien. Juzgar como paso previo para tomar una decisión, bien. Pero juzgar nada más...
Me ha hecho pensar. Besos, Isabel
Quizá lo más "juicioso" sea ser libre:
ser capaz de ejercer la propia responsabilidad para ser consciente de si quiero o no quiero mi querer o no querer las consecuencias de mis propias decisiones. A ver si hay suerte y por el camino, de paso, aprendo algo.
Un beso de aprendiz
Cuánto más vale lo uno que lo otro.
¡Me alegro de estar por aquí otra vez!
Un beso muy fuerte.
Chi sa, quien sabe, quizá, no hace falta aprender o reconsiderar e investigar lo "ya conocido". El juzgar es un proceso continuo de aprendizaje. Juzgar en si no está malo pero hay que preguntarse a qué sirve. Cuestionarse no está malo si no lleva a no poder o querer juzgar. Juzgando uno va avanzando si permite, se deja espacio para contra argumento, dentro de si mismo o presentado por otra persona. No hay que seguir profetas, dogmas, sabios, sin juzgar tu mismo si sea bueno, si haya otras visiones. Apertura, curiosidad, cuestionarse, dudar... eso es. Y un par de cosas más.
Bueno, yo creo que uno aprende hasta durmiendo, pero aún así me apunto esas palabras.
Siempre me inspiras algo, besos :)
La frase yo creo que es tremenda, porque, por esa regla, una vez que tuviéramos ya una opinión formada sobre algo no nos preocuparíamos, o nos aislaríamos, de saber algo que pueda contradecirla. Eso pasa muchas veces pero no deja de ser una forma rotunda de la estupidez
Juzgar es un término que eliminaba del diccionaria.
No hay que preocuparse: como la visión del objeto cambia el objeto, una vez juzgado este hay que volver a empezar.
Lo único que debe ser eterno es el interés.
Creo que se juzga demasiado. A este al otro, esto o aquello, cuando lo que deberíamos de hacer es no dejar de aprender nunca. Siempre se puede aprender más de todos y de todo.
La cita que aquí dejas da mucho que pensar.
Un abrazo
Desde luego, está muy bien vista esa imagen del juicio sumarísimo como carpetazo y punto final... Amenazante y cargado de peligro...
Besos y abrazos
Cuando se dice que una imagen vale más que mil palabras, suelo decir que según qué palabras, y según qué imagen.
Saludos, Isabel
Siempre hay que aprender antes que juzgar. Luego juzgar nunca. Que es lo que está mandado, y a la vez es más justo!
Un abrazo, Isabel
Amiga,como siempre:"de mi cosecha".
Creo que entre juzgar y errar sólo hay un paso. La moraleja es que los humanos solemos incurrir en ambos casos. Además, siempre aprendemos algo, quizá, algunos en humildad para saber perdonar su juicio prematuro. Un abrazo.
Me parece un definición magnífica de la necedad. Un abrazo.
Lo cierto es que no tengo manera de contastar u opinar sobre la frase de Steiner, puesto que nunca he dejado de enjuiciar y medir.
Hay una excepción y es en los numinosos instantes en que he tenido una idea, aunque dura muy poco porque luego la pienso, la mido y la juzgo.
Verdaderamente he aprendido muy poco en lo que llevo de vida. Si algún día dejo de juzgar pues ya veremos que pasa. A lo mejor descubro que está sobrevalorado el apredizaje e infravalorada la sonrisa tonta.
Un abrazo jugando**
Uno juzga cuando ha asimilado el concepto...Es entonces tiempo de aprender nuevas cosas...
Una frase muy interesante, aunque un poco enrevesada, la he tenido que leer un par de veces. Y no estoy por completo de acuerdo con ella, pues la experiencia nos dice que no se aprende siempre antes de juzgar. ¡La cantidad de veces que juzgamos desde la más absoluta ignorancia...! Seguramente el autor lo dice en un sentido ético profundo, algo bastante alejado del comportamiento general que impera en nuestros días. En cualquier caso, es una reflexión muy interesante, sobre la que conviene detenerse.
Saludos cordiales.
A mí también me hizo pensar, Elvira, por eso me interesó conocer vuestra opinión. Besos.
enric, esa es mi intencion: aprender, por eso me hago preguntas como ¿somos libres cuando juzgamos?
Otro beso.
Lara, creo dependerá de la intención de cada uno.
Besos de bienvenida.
Sí, giovanni, preguntarse, cuestionarse, todo eso ayuda, y si como dices, deja espacio para ese aprendizaje...
Musaraña,no sabes lo que me alegra servirte de inspiración. Besos.
Miguel, y es lo que más se repite.
Sí, Jesús, yo también a veces.
NáN, de acuerdo total en el interés.
Mar, se juzga tanto, que incluso obliga a muchas justificaciones innecesarias. Otro abrazo.
Gemma, creo que en algunas profesiones puede ser muy peligroso. Un fuerte abrazo.
Muy cierto, José Luis.
Carmen, poner en cuestión todos lo hacemos, pero emitir un juicio y quedarse en él sin admitir el posible error de confrontación es lo que creo imposibilita el aprendizaje.
emege, está claro que esa humildad todo lo suaviza.
Abrazos.
Gracias por participar, Maite. Otro abrazo para ti.
Muy bueno, Ofelia, si la frase es fuerte es porque se da en demasía, pero yo estoy segura de que tú has nacido sabiendo, por tanto...
Más abrazos.
Bohemia, lo que veo claro es que el tempo es dististo para cada uno, aunque para mí lo importante es seguir aprendiendo.
Isabel, la intención del autor creo va mas bien por el camino que indicas. Es una cita al pie de un capítulo de un libro sobre la técnica de actuación de los actores. Y porque como bien dices juzgamos desde la ignorancia la mayoría de las veces.
¿Qué haces juzgando? Esto es lo que pregunto mientras escucho a alguien.
Ojalá pudiéramos evolucionar juntos sin juzgarnos.
Gracias y besos.
Que bueno es, tener siempre algo que aprender.
Estoy con Nano. Hay que mantener siempre el interés, la inquietud por conocer algo nuevo cada día.
Yo también, Vero, yo también, y procuro alimentar cada día mi interés.
Besos
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