viernes, 23 de julio de 2010

150. The Visitor


De cómo los deseos y las frustraciones nos acompañan durante nuestra vida porque no tratamos con las personas adecuadas: o no nos quieren, o no nos entienden o ambas cosas.

Así es como se nos muestra Richard Jenkins, nombre real del actor protagonista que hace un excelente trabajo en esta película, al que vemos cambiar al enfrentarse a los verdaderos problemas que sufren los inmigrantes. Hasta entonces fingía trabajar, hacía cosas para estar ocupado, llevaba una existencia de mirar sin ver.

Y de pronto el tono cambia a la par que el ritmo y se enfrenta al asombro que produce la injusticia, hasta llegar a gritar, a no entender; él que casi no hablaba.

La he visto dos veces y la he grabado. No es una comedia, no, pero sí es la vida, es la realidad y aunque duela hay que ser consciente de que es así y hay que rebelarse.

19 comentarios:

Ofelia Gasque Andrés dijo...

La vi la semana pasada y me encantó. Una interpretación y química magníficas entre los actores, especialmente de la pareja madura.

Me emocioné con la última escena y, claro, decidí continuar la película con un viaje muuuuy lejos.

Besos**

Elvira dijo...

Es una película muy buena. Cómo el protagonista va entrando en contacto consigo mismo a medida que entran en su vida esas personas y tiene una relación auténtica con ellas.

Besos

giovanni dijo...

Felizmente aprendí a ver el mundo a través de los ojos y sentimientos de otras personas desde bastante joven. Me pregunto cómo se desarrolla esa capacidad o disposición (inclinancia?).

No he visto el film, pero sí el trailer de la película en que dice: You can live your life and never know who you are until you see the world through the eyes of others.

Besos

Juan C. dijo...

Bueno la película es tierna y demás. Creo que es la chica la que despierta la ternura del espectador (y del aburrido hombre europeo, magnífico Richard Jenkins, como siempre). El inmigrante por otro lado es encantador también. Es una película al servicio de las ideas modernas (solidaridad, impotencia del individuo ante las instituciones, vacío de sentido y el mito de la humanidad perdida por un mundo hipertectificado, hiperburocratizado, etc...).
La película está bien, aunque sólo han pasado tres años la veo ahora, y a mi por lo menos, ya me ha resultado algo anticuada. Los productos de moda envejecen rápido.
Quiero decir que no estoy muy de acuerdo con el mensaje de la película. Menos tambores en el parque y más Beethoven, creo yo, pero bueno, es muy conmovedora, muy bonita.
Sobre todo larga vida a Richard Jenkins...

Un saludo.

NáN dijo...

Yo la he vuelto a ver y no estoy de acuerdo contigo, Juan C. Tu mirada es blancocéntrica. ¿Por qué menos tambores?

Precisamente, el personaje estaba sumido en la desdicha y escuchaba la música que tú dices. Encontrar el mundo que te rodea, normalizarlo, me parece profundo.

Me parece una película valiosísima que he vuelto a ver con gusto. Giovanni, no te la pierdas.

jan joost teunissen dijo...

Nán, tengo el trailer incluido en el post que acabo de publicar en mi otro blog "Thoughts". Lees inglés (o es una pregunta tonta?)? No sé si valdrá la pena de publicar el mismo post en mi otro blog, "Tutto è possibile"... Habrá gente interesada? Para mí el mundo de mi trabajo es bastante separado del mundo 'sentimental' de mi otro blog y de mis vídeos, aunque me gustaría hacer acercarlos un poquito más.

NáN dijo...

Jan, ya te he contestado en el otro blog con un SÍ grande como una casa.

Necesitamos ese tipo de perspectivas de quienes os sabéis mover en esos temas.

Con respecto a la peli, me acuerdo que a la salida defendí una lectura de ella que va más allá de la solidaridad y todo eso.

A mí, la película me mostraba que nuestro mundo, el occidental, ha agotado las posibilidades de contacto con el mundo como totalidad, los recursos anímicos. Vivimos en un mundo del conocimiento y de lo virtual.

En esa situación, lo que la película retrata no es que por ser buenas personas, y por la racionalización de la vida, debamos ser solidarios con los que no tienen nada y viven como "ilegales". Lo que no está diciendo es que necesitamos desesperadamente que nos transmitan la savia y los deseos potentes de vivir.

Me acuerdo que aquella noche usé como apoyatura la literatura británica, que había entrado en encefalograma plano y que había salido de él gracias a los autores del Imperio, que habían reintroducido la vida como pulsión en el guión establecido.

Creo que entre lo razonable de ser solidarios y entender que los necesitamos desesperadamente hay una diferencia que podría, de ser entendida, arreglar muchas cosas.

Un abrazo a todos.

giovanni dijo...

Nán, muy interesante lo que cuentas sobre el ver de la peli y la discusión que tuviste después con tus amigos. Tendré que verla, charlarla con mis amigos y presentar tus reflexiones. También podría compartir con mis amigos la discusión en tu blog sobre la izquierda mundial. Existe esa izquierda mundial? Sí, existe, aunque un poco escondido (para los grandes medios de comunicación casi no existe, pero en los festivales de cine en Amsterdam y Rotterdam estaba muy presente, y también en blogosfera) y en diferentes formas. He participado muchos años en la denuncia, hasta que me cansó y preferí formar mi propio foro internacional de diálogo (FONDAD) en vez de denuncia. Me cuesta a veces seguir teniendo confianza en la utilidad ese diálogo, en lo que aporta y podría aportar (a pesar de que algunos de mi red Fondad son bastante influyentes), pero sigo manteniéndolo, por medio de correo electrónico. Raras veces escribo sobre ello en mi blog “Thoughts”, por falta de tiempo y porque los diálogos son privados en vez de públicos.

Sí, somos bastantes cerebrales y virtuales. (“Vivimos en un mundo del conocimiento y de lo virtual.”) Lo del virtual es un gran don del mundo virtual si se lo sabe usar bien, para ti mismo, y para diálogos como este.

‘La vida como pulsión…’ Te refieres al corazón, a nuestros sentimientos?

‘entender que los necesitamos…’ Qué necesitamos? Amistad? Cercanía? Autonomía (en vez de ser parte de masas manejables, manipulables y dominadas)?

un abrazo

Isabel dijo...

Qué suerte la tuya, Ofelia, ese viaje, yo también lo deseé.

Abrazos

Sí, Elvira, lo que comentas me gusta especialmente, reflejar el cambio es algo que consigue muy bien el trabajo del actor.

Besos

Ver el mundo a través de otros ojos, más que inclinación -creo que es lo que quieres decir- es sabiduría y generosidad, es poder situarse en el lugar del otro para comprenderlo mejor, para escucharlo, para descubrirlo.
Poseer esa capacidad es una riqueza y me alegro, giovanni, de que la poseas.
He pasado por tu blog y me ha gustado ver que lo que has colgado.
Besos

¿Ideas modernas?, Juan, te diría que son los mismos perros con distintos collares, pero respeto tu opinión y te agradezco la hayas manifestado con tu visita.
Saludos

NáN, me alegro de que compartamos gustos por esta peli.
jan joost, te he dejado un comentario en este otro blog y...
chicos, me encanta este intercambio que hacéis, de verdad.
NáN, interesante tertulia la que provocó la peli.
¡Vivan las tertulias!
Ayer mismo en la prensa alguien hacía el elogio de las mismas.
Pongo el enlace:
http://www.elpais.com/solotexto/articulo.html?xref=20100725elpepiopi_5&type=Tes&anchor=elpepuopi

Gracias y besos.

Marissa Tamayo dijo...

A mí también me encantó la película. Es un reflejo de lo que está pasando en el mundo, de esa migración que arranca a veces involuntariamente a las gentes de su lugar natal para buscar fortuna en otro continente. Bienvenidos los migrantes porque enriquecen la cultura y colorean la vida.

Isabel dijo...

Marissa, qué alegría verte por aquí.
Tienes mucha razón en lo que dices.
Un abrazo.

Gemma dijo...

La vi en Barcelona, en vídeo, y me pareció fantástica.

Es una peli-revulsivo, muy vitalista , aunque el desenlace sea de lo más triste respecto a su situación personal. De las que te sigues acordando pasado el tiempo.
Un besazo

Isabel dijo...

Tienes razón, Gemma, sobre el desenlace, es triste, pero también fiel a esa tristeza de realidad que tenemos, pero me quedo con los buenos deseos del protagonista y me gusta mucho el cambio que experimenta.

Me gusta verte aquí, gracias y besos.

VERONICA LEONETTI dijo...

Pues sí. Después de estos comentarios, verla es obligatorio antes de que termine el verano.

Anónimo dijo...

Los contertulios de la mesa-camilla me han incitado a verla de inmediato.
En cuanto la faena la faena que traigo entre manos, vaya¡¡
Besos de Uva -en remojo-.

Txema dijo...

La he visto hace unos días y me dejó un poco deprimido. Pone de manifiesto las cerencias -verdaderas- que las sociedades occidentales tiene sobre temas de ese tipo.

saludos

Isabel dijo...

Uva, los contertulios me acompañan y enseñan cada día con sus opiniones, es un placer, como bien sabes me producen las tuyas.
Espero verte y comentarla.
Besos

Txema, perdona el retraso en contestar a tu comentario y darte la bienvenida a esta mesa camilla, como la llama Uva.
Tienes razón, continuamente comprobamos lo poco que avanzamos en este lado, así nos va.
Gracias por entrar y saludos.

Alfredo J Ramos dijo...

Una gran película. Nada más verla me entraron muchas ganas de aprender a tocar el djembé.

Isabel dijo...

Hola, Alfredo, es verdad contagia bastante.
Saludos