Ya se ha recogido el arroz en las marismas y los silos al fondo están llenos. Hoy día el arroz es un cultivo totalmente mecanizado, pero sus comienzos fueron muy duros.
Un trabajo penoso y todo ello unido a las luchas por las circunstancias de represión social de aquellos largos años.
Una bandada de moritos sobrevoló los arrozales el día que visitamos Isla Menor. Otra nota de color en esta visión distinta de este alimento tan básico como delicado, y tan dependiente de un buen equilibrio ambiental.
7 comentarios:
Qué bien detener la mirada en el arroz.
Me ha encantado.
Un beso.
Y a mí...
Me gusta a la cubana, en paella, caldoso, en sopa, blanco, amarillo, grano largo, integral, etc. etc, pero sobre todo ¡con leche y mucha canela!.
Se nota que es mi comida preferida, no?
Bonitas fotos, Manué.
Un super beso.
June, Lara, es una gozada contemplar esas llanuras llenas de ese arroz que no falta en nuestras mesas.
Como tú bien lo nombras Lola, ya sé que te gusta el arroz con leche, tu madre, mi tía, lo hace como nadie.
El domingo en Los Palacios degustamos uno nuevo: arroz con setas y foie gras o fuagrás, estaba exquisito.
Besos y más besos.
Felicidades a Manolo por estas lindas fotos. En cuanto a este cultivo, también lo he contemplado en primavera, esa extensa marisma cubierta de verde manto y cientos de cigüeñas y garzas que picotean en sus charcas. No es muy conocido que esta zona sevillana es la mayor productora de arroces de España.
Sí, emege, tienes razón, creo somos aquí más productores que en Valencia.
Besitos, se lo diré al fotógrafo
Oichchch, qué bonito¡¡
Lo mismo me llevas de la mano por la divina playa de la Victoria, en Cádiz, que nos metemos en los arrozales, que tiramos pal norte... Magnífico sentarse un rato a disfrutar con tus hilos, tus bobinas, tus botones. Todo junto pero nada revuelto.Magnífico. Uva.
Publicar un comentario