Lo propio del verano y si estás cerca del campo es encontrarte de todo. Soy amiga de los que no pican (este año ha llovido tanto que hay que temer a los mosquitos), pero a los demás me gusta observarlos, incluso en la ciudad, aquí en sus últimos momentos:
No sé si por el calor, pero este verano hay menos moscas, eso sí, más golosas.