Si
leo poesía ella aparece y no es la musa, o tal vez sí. Es Rosa con
su vitalidad con su saber apreciar el tono, la forma, los susurros.
Sólo ella sabía leer entre líneas lo oculto. Tanto del poema como
de la vida.
Es una presencia, su cara llena de arrugas: sabiduría,
su pícara sonrisa: travesura, sus ojos escudriñándolo todo:
inteligencia, su voz saliendo de lo más hondo: calidez.
Ahora
ya tienes, Rosa, quien traerá en sus genes ese gran legado: una
nieta preciosa que ha nacido justo al año de tu ausencia.
MAR
Me
ha encantado volver a verte.
Tus
formas
tu
olor
tu
color
tu
sonido.
De
enfado
de
calma.
De
no entender.
Rosa
Guzmán,
Chipiona, 25 de enero de 2014.
https://youtu.be/1zKUddt-acg
ResponderEliminarUn abrazo.
¡ Que bonito ! Un beso.
ResponderEliminarQué lindo homenaje a Rosa y
ResponderEliminarfelicidades por esa beba
que la lleva en sus genes.
Besos
Emotivo comentario sobre Rosa y bello homenaje a su recuerdo, la vida continua y los buenos momentos perduran para siempre.
ResponderEliminarBesos Isabel
No sé quién es y no he podido encontrarla en Internet. Pero el poema tiene una densidadpor la que me gustaría leer algo más de ella.
ResponderEliminarLoam, qué gusto verte por aquí. Me gustó mucho el enlace.
ResponderEliminarGracias y otro abrazo de vuelta.
Teresa, me gusta que te guste.
ResponderEliminarMás besos para ti.
Myriam, hay personas amigas que se nos quedan en el corazón y perduran. Muchas gracias por tus buenos deseos.
ResponderEliminarGran abrazo.
Pilar, me alegra encontrarte aquí. Estoy de acuerdo contigo, las ausencias nos acompañan en ese tiempo que nos da la vida.
ResponderEliminarMuchos besos y feliz verano.
NáN, Rosa no publicó nunca, escribía para ella y disfrutaba tanto de todas las cosas de la vida que necesitaba esa libertad. Compartíamos el gusto por la palabra, el teatro y más cosas con dos amigas más, ella sigue presente en esa mesa que se ha quedado coja.
ResponderEliminarTú has calificado muy bien su lectura: densidad, esa cualidad que te permite adivinar mucho más allá y que te deja con ganas.
Gracias por tu interés y un fuerte abrazo.
Las huellas ajenas que no conforman también y crecemos gracias a ellas, aún en la ausencia.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Precioso, tu homenaje y su poema. Un beso
ResponderEliminarNo, no lo había visto, 31 de agosto es una mala fecha para los blogs.
ResponderEliminarGracias
Pues sí, virgi, con ellas aprendemos y lo que nos enseñan también forma parte de su ausencia.
ResponderEliminarOtro abrazo bien grande para ti.
Elvira, muchas gracias y más besos para ti.
ResponderEliminarmi comentario...es un sentimiento que no termina d salir. Es ésa mesa coja.
ResponderEliminarHas escrito lo qe yo siento. Para qé más.
Qué hermoso q haya llegado Julia.
ABRAZOS. Uva.
Lo sé, Uva, lo sé y me alegra compartirlo contigo. Menos mal que la vida se abre paso y ya tiene su madre en qué pensar y hacer.
ResponderEliminarGran abrazo, amiga.
Sí, esa imagen de tender la ropa en espacios abiertos y pisar sus sombras sobre la hierba es grato. Como grato es el recuerdo de todo ello y de quienes lo protagonizaban ayer...
ResponderEliminarUn abrazo, Isabel.
Las cosas sencillas, Ernesto, si se volviera a ellas con más frecuencia...
ResponderEliminarOtro abrazo para ti.