Un cielo en un infierno cabe (tal vez el infierno sea sólo eso, un lugar de encuentro para cielos cansados, rotos, asustados, pero cielos al fin y al cabo).
"Porque es un día más y tú sigues conmigo" Precioso cómo lo dices y esto siempre cabe en esa perola llena de nubes, ese cielo tupido de blanco, como tu porque sí...
Josep, fue mirar el barreño y se me vino a la boca esa frase porque la memoria es un cajón de sastre. Y como espero, que igual que inventaron la mula-el buey, el cielo-infierno y todas esas dualidades..., antes de que quiten esta última, yo me he adelantado en decir dónde está el mío (mi cielo) porque a mí me gustan las cosas bien recogiditas, en un barreño mismo, para que no se me escapen, ya ves. Lo que no he podido aumentar es el pájaro que canta, pero está en su sitio porque yo lo ví en mi cámara, y como lo escuché bien acompañá, pues eso... Un beso con abrazo.
Cabopá, gracias por adivinarme. Un gran abrazo.
Elvira, ese olé tuyo a esta hora de la mañana me levanta por dentro. Besos agradecidos.
Ana, bienvenida, me encanta que te guste, pero no entiendo por qué lo ves como "nostalgia pura". Yo escribo así (no sé escribir poemas) cuando me brota un sentimiento y en este caso fue de alegría. Celebro el aquí y ahora porque, en definitiva, es lo que tenemos. Gracias por tu comentario, es lo bueno de este medio poder recibir vuestras impresiones de manera inmediata. Abrazos.
Zarzamora, que no te había visto, estabamos escribiendo a la vez. Yo lo que tú digas lo suscribo porque tú sabes mucho. Abrazos contenta de verte por aquí.
Tú sí que sabes.Como todo lo bueno, la esencia en tarritos pequeños y a disfrutar de su olor día a día. A elegir, prefiero el infierno-infierno, quizá sea más divertido del que tenemos aquí y ahora... ¡qué malísima soy! Un millón de besitos. Ave Peregrina (que yo no estaba en el árbol,¡eh!)
Muy bonito! Me encantan las fotos, ya sabes que soy una enamorada de las imágenes y de todo lo que se pueda captar con una cámara para poder mostrar a los demás.
Las imágenes cotidianas son las que más me gustan.
Precioso texto y su reflexión. Seguramente un cielo sí cabe en un infierno en cambio, un infierno introducido en el cielo lo destruye rápidamente... Besos.
Ladelmedio, lo dices bien: mi cielo, cada una tenemos el nuestro y es algo que varía continuamente como la vida. Besitos.
Ave, si no aprendiéramos de las amigas... Me parece que en el infierno se estará más calentita. Y para ver cosas volando por esos mundos, tu eres un ejemplo. Abrazos.
(*, me encanta que lo digas porque ese fue el deseo. Más besos para ti.
Rosario, disfrutar de las cosas pequeñas, y no estar en continuo pesimismo anima a seguir, ¿no te parece? Besos.
Marta, cotidiano y de pueblo y huerto. Me alegra que te guste. Otro abrazo.
Homero, unas porque sí como en este caso pero a mí, a veces, también me gusta provocarlas. Gracias y besos.
Darío, me alegra mucho que te guste.
Lucía, ¿es que no se ha visto el pájaro? Pues te aseguro que está ahí, es una cosita de un gris oscuro entre las hojas, al pinchar y aumentarlo los píxeles se difuminan, pero yo, incluso, le veo la cabecita azul. Tenía un canto que nunca lo habíamos escuchado y bellísimo. Abrazos.
Maria Dolors, que subidón. Gracias y besos.
Giovanni, eso quiere decir que tampoco has visto el pájaro, “pordios, qué fracaso” Eso sí, asumo toda la responsabilidad de las últimas fotos del blog. Más besos.
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Un cielo en un infierno cabe (tal vez el infierno sea sólo eso, un lugar de encuentro para cielos cansados, rotos, asustados, pero cielos al fin y al cabo).
ResponderEliminarHermoso lo que dices y como lo dices.
Un abrazo con beso.
"Porque es un día más y tú sigues conmigo"
ResponderEliminarPrecioso cómo lo dices y esto siempre cabe en esa perola llena de nubes, ese cielo tupido de blanco, como tu porque sí...
Besicos
¡Olé! Y me saco el sombrero. Besos
ResponderEliminarNostalgia pura que me ha llegado derretida en palabras, en letras de una enorme belleza.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cuando podemos seguir contando los días, no hay purgatorios que valgan...
ResponderEliminarBesos, Isabel.
Josep, fue mirar el barreño y se me vino a la boca esa frase porque la memoria es un cajón de sastre.
ResponderEliminarY como espero, que igual que inventaron la mula-el buey, el cielo-infierno y todas esas dualidades..., antes de que quiten esta última, yo me he adelantado en decir dónde está el mío (mi cielo) porque a mí me gustan las cosas bien recogiditas, en un barreño mismo, para que no se me escapen, ya ves.
Lo que no he podido aumentar es el pájaro que canta, pero está en su sitio porque yo lo ví en mi cámara, y como lo escuché bien acompañá, pues eso...
Un beso con abrazo.
Cabopá, gracias por adivinarme.
Un gran abrazo.
Elvira, ese olé tuyo a esta hora de la mañana me levanta por dentro.
Besos agradecidos.
Ana, bienvenida, me encanta que te guste, pero no entiendo por qué lo ves como "nostalgia pura".
Yo escribo así (no sé escribir poemas) cuando me brota un sentimiento y en este caso fue de alegría. Celebro el aquí y ahora porque, en definitiva, es lo que tenemos.
Gracias por tu comentario, es lo bueno de este medio poder recibir vuestras impresiones de manera inmediata.
Abrazos.
Zarzamora, que no te había visto, estabamos escribiendo a la vez.
ResponderEliminarYo lo que tú digas lo suscribo porque tú sabes mucho.
Abrazos contenta de verte por aquí.
Ay, qué gustazo de cosa tan bonita que nos has traído.
ResponderEliminarAhí tienes tu cielo, bien recogido. Precioso.
Tú sí que sabes.Como todo lo bueno, la esencia en tarritos pequeños y a disfrutar de su olor día a día. A elegir, prefiero el infierno-infierno, quizá sea más divertido del que tenemos aquí y ahora... ¡qué malísima soy! Un millón de besitos. Ave Peregrina (que yo no estaba en el árbol,¡eh!)
ResponderEliminarParece un brindis por la vida.
ResponderEliminarUn beso, Isabel.
Isabel muy bonito, es estupendo alegrarse por un día más, estar contenta solo por eso.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte amiga, desde mi Librillo.
Muy bonito! Me encantan las fotos, ya sabes que soy una enamorada de las imágenes y de todo lo que se pueda captar con una cámara para poder mostrar a los demás.
ResponderEliminarLas imágenes cotidianas son las que más me gustan.
Un abrazo, Isabel!
Hola Isabel: Hermosa metáfora la que has creado. A veces las cosas pasan pues "por que sí..." Besos. H.
ResponderEliminarOh! Qué hermosa imagen!!!
ResponderEliminarQué chula la foto del caldero. Es mágica, no sé si de la magia buena o de la mala... ¿qué hiciste con el pájaro? jeje
ResponderEliminarAbrazo
Me encanta como te expresas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Veo una cara (de la fotógrafa) entre las nubes? Pura imaginación?
ResponderEliminarUn beso
Alegría y decisión para enfrentarnos a lo que suceda.
ResponderEliminarBesitos
Precioso texto y su reflexión. Seguramente un cielo sí cabe en un infierno en cambio, un infierno introducido en el cielo lo destruye rápidamente... Besos.
ResponderEliminar¡Qué preciosidad, Isabel!
ResponderEliminarLadelmedio, lo dices bien: mi cielo, cada una tenemos el nuestro y es algo que varía continuamente como la vida. Besitos.
ResponderEliminarAve, si no aprendiéramos de las amigas...
Me parece que en el infierno se estará más calentita. Y para ver cosas volando por esos mundos, tu eres un ejemplo. Abrazos.
(*, me encanta que lo digas porque ese fue el deseo. Más besos para ti.
Rosario, disfrutar de las cosas pequeñas, y no estar en continuo pesimismo anima a seguir, ¿no te parece? Besos.
Marta, cotidiano y de pueblo y huerto. Me alegra que te guste. Otro abrazo.
Homero, unas porque sí como en este caso pero a mí, a veces, también me gusta provocarlas. Gracias y besos.
ResponderEliminarDarío, me alegra mucho que te guste.
Lucía, ¿es que no se ha visto el pájaro? Pues te aseguro que está ahí, es una cosita de un gris oscuro entre las hojas, al pinchar y aumentarlo los píxeles se difuminan, pero yo, incluso, le veo la cabecita azul. Tenía un canto que nunca lo habíamos escuchado y bellísimo. Abrazos.
Maria Dolors, que subidón. Gracias y besos.
Giovanni, eso quiere decir que tampoco has visto el pájaro, “pordios, qué fracaso”
Eso sí, asumo toda la responsabilidad de las últimas fotos del blog. Más besos.
virgi, no hay más remedio, y porque no nos van hacer desaparecer. Esta es otra guerra, solo que económica. Besazo.
ResponderEliminarIsabel, sí claro, pero bueno aún tenemos agua para apagar los fuegos, nos defenderemos como podamos. Abrazos
Gemma, qué alegría me das. Muchos besos.
Por que si, por eso estoy aquí: vengo buscando ese cielo.
ResponderEliminarBesos
Es el cielo de mi pueblo, Myriam.
ResponderEliminarAbrazos