
"Llegarás muy alto", era la frase preferida de su padre. Y Ernestito, enclenque e inseguro, subió.
Y, para ello, mintió, trepó y robó. Y llegó; fue entonces, cuando al dar un traspié, ¡uy!
Y bajó, bajó, bajó...

A mi amiga, Elisa I. Mellado, que me regaló las tres fotos.
...hasta el fondo del mar, para conocer las profundidades y aprender de ellas.
ResponderEliminarMe ha encantado tu breve escrito y lo bien ilustrado que queda con esas imágenes. Besos
Sí, cuanto más alto se llega más dura es la caída...
ResponderEliminarBesos, Isabel.
¿Lo de arriba es una foto? Realmente parece irreal
ResponderEliminarLa foto de la escalera que baja es muy refrescante, así que me quedo con esa, aunque sea la de bajada. De todas formas nací aquí abajo y nunca he tenido intención de subir.
ResponderEliminarUn beso.
Esas frases de los padres tienen un peligro!
ResponderEliminarLo previsible siempre tienta, ¿no?, por si a lo mejor se incumple.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues has conseguido un micro fantástico y perfectamente ilustrado.
ResponderEliminarBesos.
Ojalá eso mismo les pasará a todos los que subieron gracias a pisotear a otros, con argucias y engaños. La primera foto, como apuntan por arriba, es como irreal, muy bonitas.
ResponderEliminarBesos
Eso mismo podría pasarle a muchos de los que están ahí arriba tocándonos las narices.
ResponderEliminarBesos
Amiga,un buen proverbio para los tiempos que corren.Me ha gustado. Elegiste bien la subida y bajada. Ya sabes, a lo largo y a lo ancho. Un fuerte abrazo y un montón de besitos.
ResponderEliminarEl equilibrio falla cuando se sube demasiado alto.
ResponderEliminarPreciosas fotos.
Besos
en un día como hoy el castigo sería que la escalera bajara hacia este sol de verano.
ResponderEliminarUn abrazo.
La primera foto parece una ilustración. Es estupenda.
ResponderEliminarMe ha gustado el texto cosido a las imágenes. Quien sube puede bajar y viceversa. Es la escalera de la vida.
Besos.
El que muy alto sube,dicen, más rápido cae...
ResponderEliminarUnas fotos (las tres)muy bucólicas.
Besicos desde el Mar Menor.
Lo malo no es subir. Lo malo es empujar, mentir, robar y creer que la altura no produce vértigo...
ResponderEliminarUn abrazo, Isabel
Era previsible y conozco a muchos ernestitos, por desgracia.
ResponderEliminarBesos
Abajo tampoco se está mal... siempre que no hayas llegado muy alto...
ResponderEliminarMuxutxu bat, Isa... linda entrada, como todas...
Muy sintético. Ojalá todos los que suben así, bajaran en algún momento.
ResponderEliminarBesos
Elvira, en el caso de los que han sido malos, o muy malos, que se queden ahí.Gracias y besos.
ResponderEliminarY que lo digas, Eva, y que lo digas.
Más besos para ti.
Sí, Miguel, está tomada en Mojacar, lo que pasa es que la fotógrafa es muy buena y busca siempre ángulos imposibles.
Sue, con la que te quedas es de isla Armona en Portugal. Yo estoy contigo, tocando el suelo se está más en contacto con la realidad.
Otro beso.
Claudía, es cierto, peligro y consecuencias. Un beso.
(*, a veces, ni dándose de cara con lo previsible se dan cuenta del daño que hacen y se hacen. Otro abrazo para ti.
Paloma, viniendo de ti que tan bien sabes utilizar las palbras... Gracias y besos.
Lucía, esa era mi intención al escribirlo. Me alegra te gusten las fotos.
Un abrazo.
Eso, Elena, eso. No sé si será el calor, pero que mala me estoy volviendo. Más besos para ti.
ResponderEliminaremege, ya sabes, gracias a ti.
Un abrazo.
Ladelmedio, pues algunos deben ser buenos equilibristas, hasta hacer que se caigan los demás.
Gracias por pasar y comunicaré que os gustan las fotos.
Besos.
mjromero, de haber podido fotografiar el fuego que está cayendo, aún siete días después, te aseguro que tu idea hubiera sido efectiva.
Gracias por tu visita.
Un abrazo.
Isabel, me alegra que te guste, así como la foto.
Un fuerte abrazo.
Cabopá, tienes razón, era un refrán, creo que algo así: si más alto subes, más dura será la caída.
Besos refrescantes.
Carmen, creo que está claro, lo malo es subir haciendo daño.
Un beso.
Myrian, cada vez parece que hay más ¿verdad? O será que ahora las noticias vuelan. Más besos para ti.
Joseba, y si es remojadito mejor que ¡hace un calor aquí abajo!
ResponderEliminarGracias y besos.
Virgi, la pena es que sintetizar no aligera el daño que hacen.
Un abrazo.
Bellas fotos. Tan ciertas las palabras. Todo un regalo de entrada, Isabel.
ResponderEliminarVero, gracias siempre por las tuyas.
ResponderEliminarBesos veraniegos.
Oich qué bueno¡¡ Un micro realmente. Unas fotos y te inspiras. Me encanta. La Uva...desde los montes.
ResponderEliminarUva, aún no sé si es un micro o qué, pero estoy aprendiendo con lo que respiro de los demás que saben mucho y bien; como de ti, cuando nos cuentas tus aventuras por esos montes.
ResponderEliminarBesazo.
Qué sugerentes pueden llegar a ser las escaleras, ¿verdad? Estas que traes lo son a más no poder. La primera da mucho vértigo; la segunda trae el temor del agua y del pasado.
ResponderEliminarGenial!
Leo, me gusta mucho como lo describes.
ResponderEliminarUn abrazo.