miércoles, 25 de mayo de 2011

200. Del cieno al cielo y viceversa

Lo más valioso es siempre lo que apenas

tiene cotización: el barro de este mundo.

El légamo si os suena menos claro:

Ese transfigurase peregrino

del cieno en cielo

del odio en amor

de la noche al día.

Esa transformación de la que somos

héroe y víctima.

Alguien somos al fin.

Pero de quién seremos para siempre

es lo que nos parece que nos cantan

los pájaros lejanos.

De quién somos. Antología poética. Juan Gil-Albert


24 comentarios:

  1. Sabes, me has hecho recordar cuando erámos pequeños y jugabamos con el barro.
    Preciosas las fotos y un poema que desconcía me lo apunto.
    Besicos.

    ResponderEliminar
  2. "Légamo", no conocía esa palabra.
    El amor tampoco cotiza.
    Me ha gustado.

    Besos

    ResponderEliminar
  3. Me apunto el nombre.
    Quiero ser légamo y viento peregrino.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Me gusta todo, pero lo que más la fotografía de la parte de abajo, una bandada realmente numerosa.

    Saludos, Isabel

    ResponderEliminar
  5. Cabopá, acabo de poner un enlace porque este poeta, a pesar de la generación del 27 es poco conocido.
    Me alegra haber contribuido a gratos recuerdos.
    Muchos besos.

    Lucía, ¿verdad que es hermosa?, dice el María Moliner que es de raiz céltica: estar echado o formar una capa, eso dice de este barro pegajoso.
    Tienes mucha razón sobre el amor y éste sí que es necesario.
    Más besos.

    Aquí, mejor ligerito para que no nos impida volar.
    Otro abrazo para ti.

    José Luis, son las fotos que dieron lugar a esta entrada sobre los arrozales:
    http://elcosturerodeisabel.blogspot.com/2009/10/103-arrozales.html
    Manolo hizo bastantes porque fue unos de esos días en que todo estaba precioso.
    ¡Qué bien, que te guste!

    ResponderEliminar
  6. "Esa transformación de la que somos
    héroe y víctima."

    Muy bueno. Me quedo con estos versos hoy.

    Besos, Isabel!

    ResponderEliminar
  7. Hola Isabel: gracis por haber llegado hasta mi casa en la que te doy la bienvenida. A mi también me gusta la tuya, este "costurero, botiquín manual que sirve para coser heridas, unir bordes, tapar agujeros". Te enlazo y te iré leyendo con calma.

    Besos
    Al Cielo, siempre.

    ResponderEliminar
  8. Saber de quién somos y, sobre todo,... de quién queremos ser... y llegar a ser de ese quien...
    Otra delicia, Isabel...
    Sigue cosiendo...
    Un abrazo...

    ResponderEliminar
  9. Lo importante no se ve, es sencillo, entrañable. Y en las cosas pequeñas está la felicidad.

    Qué oportunos los versos de Juan Gil-Albert. Llevas razón en que es poco conocido, y es un gran poeta.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  10. De aquellos barros vienen estos lodos, pero podemos salir de él levantando la cabeza y pisando fuerte.

    Bonitos versos Isabel.

    SUE.

    ResponderEliminar
  11. Maravilloso ...como este espacio que vas hilvanando en tu costurero.
    un abrazo grande

    ResponderEliminar
  12. Huy, parece que hemos tenido sentimientos y pensamientos a dúo: De quién somos, de quién seremos, por qué somos quiénes somos, quién mueve los hilos...

    Un beso, ISABEL

    ResponderEliminar
  13. Huy, parece que hemos tenido sentimientos y pensamientos a dúo: De quién somos, de quién seremos, por qué somos quiénes somos, quién mueve los hilos...

    Un beso, ISABEL

    ResponderEliminar
  14. Del cieno al cielo recorriendo inversamente el camino si hace falta para lograr esa transformación.
    Porque sí que somos...
    Besos, Isabel.
    Unas fotos muy acertadas para la entrada.

    ResponderEliminar
  15. Elvira, las palabras de este escritor siempre llegan.
    Más besos para ti.

    Myrian, ha sido un placer, nos leeremos las dos.
    Besos por las alturas.

    Joseba, buena puntualización, y llegar a ser de ese quien en libertad.
    Cosiendo, viviendo, seguir es lo que quiero.
    Besos.

    Isabel, de acuerdo contigo, es básico. Más besos.

    Sue, yo he visto en los docus que coches más grandes y pesados han salido del pantanal, y muchas veces con más maña que fuerza.
    Gracias y besos.

    momo, gracias, pero no sería posible sin vosotr@s.
    Muchos besos.

    Carmen, me alegro mucho.
    Un abrazo.

    Zarzamora, claro que somos y cada vez más pidiendo lo justo.
    Más besos para ti que luego tú los repartes estupendamente.

    ResponderEliminar
  16. Regreso para coemntarte esta entrada: Somos barro, es nuestra naturaleza, a veces lo olvidamos y nos creemos dioses.

    Besos

    ResponderEliminar
  17. hola, Chicos, Sólo quiero decir lo que es un gran blog ha llegado hasta aquí! He estado alrededor por mucho tiempo, pero finalmente decidió mostrar mi aprecio por vuestro trabajo! Pulgar hacia arriba, y mantenerlo en marcha!

    ResponderEliminar
  18. Pues me alegro de que hayas llegado. Ahora solo espero que te quedes.

    Un saludo!

    ResponderEliminar
  19. Me quedo, cómo no, con eso de que lo más valioso no tiene cotización

    ResponderEliminar
  20. Myrian, toda la razón. Gracias por volver
    Más besos.

    Anonimo, gracias, pero sería bueno te identificaras.

    juan, todo se andará...

    Miguel, totalmente de acuerdo contigo.

    Saludos

    ResponderEliminar
  21. Un recorrido terrenocelestial.
    Tan simples y tan sabias.
    Besitos

    ResponderEliminar
  22. Me han gustado mucho los hilos con los que está cosido este espacio. Y el barro del poema. Y esa bandada de pájaros.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  23. virgi, la sabiduría de algunos poetas.
    Un abrazo.

    (*, muchas gracias, me gustaría haber escrito tu nombre para darte la bienvenida, te visitaré a ver si lo conozco.

    ResponderEliminar
  24. Esas transformaciones y esos vuelos, pasan casi siempre a la misma hora.

    ResponderEliminar