Red tejida con hilos invisibles,
cárcel de aire en que me muevo apenas,
trampa de luz que no parece trampa
y en la que el pie se me quedó –entre cuerdas de luz también...-
bien enlazado.
Cárcel sin carcelero y sin cadenas
donde como mi pan y bebo mi agua día por día...
¡Mientras allá fuera se me abren en flor, trémulos, míos aún,
todos los caminos de la tierra!...
Dulce María Loynaz
Poemas escogidos
a Mª J.V. con cariño.
Ésa que no se ve, la peor cárcel
ResponderEliminaren aire cotidiano suspendida,
inmóvil, invisible, tan cercana
que los ojos no pueden ver su imagen,
los oídos no escuchan las palabras,
las narices no aprecian los aromas,
las bocas no se buscan en los besos,
los dedos... ¡estas cosas no se tocan!
Un beso liberado en los sentidos
Cuanto nos cuesta sabernos libres, no?
ResponderEliminarBello el poema, pero me he quedado prendada de la foto, con sus luces y sus sombras.
ResponderEliminarBesos
Un poema precioso. A veces, unas de mis poetas favoritas.
ResponderEliminarLa foto ¿Un tinao alpujarreño?
Me recuerda a Capileira o Pampaneira.
Besos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarComo verás, soy rápido en la venganza, anulando comentarios.
ResponderEliminarEl poema es una preciosidad.
enric, esos sentidos que a veces se atrofian, pero que tú los elevas con tus palabras.
ResponderEliminarVero, puede costar toda una vida, como conocernos.
Elvira, viniendo de ti, una prefesional, es un halago.
Aquí, ¡lo que tú no sepas!...
Es Capileira.
Dulces coincidencias.
NáN, para escabullirse hace falta ser rápido, jeje...
Me alegra que te guste la palabra de Dulce.
Besos a todos.
¿ Por qué será que los humanos nos creamos tantas cárceles invisibles?
ResponderEliminarEntre la imagen y las letras escogidas.......invocaste la poesia!
ResponderEliminarY como siempre, fue todo un gusto leerte.
Besos
Me ha encantado el poema, pero en especial ese pequeño detalle que me parece estremecedor del "míos aún"
ResponderEliminarPara pensar cómo nos condenamos. Buena elección.
ResponderEliminarUn beso.
Bellos versos, Isabel, y qué bien elegidos.
ResponderEliminarEsas vigas encaladas -madera blanca- con que los presentas me traen recuerdos tan hondos. Un abrazo.
Que terrible (palabra con la misma raíz que Tierra) y bello es el camino de la libertad.
ResponderEliminarEs un gran placer sentarse a tu lado a coser.
Besos**
Cuántas veces nos sentimos encerrados aún teniendo todo el aire para respirar.
ResponderEliminarHermoso poema y bellísima foto.
...se me abren en flor
ResponderEliminar-Hola flor, aquí estoy.
-Bienvenida, dijo la flor.
Un beso
Amiga mia, a pesar de la lejania que por ahora nos separa he conectado en un ciber y no he podido evitar la tentacion de abrir tu blogs. Sabes que? me siento afortunada de poder leer a esta poeta y escritora desde esta encantadora isla de Lanzarote,que ella visito con frecuencia y donde la descubri !Me has emocionado!Un fuerte abrazo y besitos
ResponderEliminarAraceli, quizás sea el miedo, el invisible miedo que siempre aflora.
ResponderEliminarMusaraña, a veces son primero las palabras dedicadas, como en este caso, y otras la imagen. Siempre busco lo que me inspira relación entre ellas. La poesía de Dulce brillaba sola esta vez.
Miguel, siempre tan agudo, quizás la propiedad sobre nuestros pasos debiera ser de aquello que nos guía.
Paloma, es nuestra elección en todo caso.
Juan Antonio, yo sólo he elegido, el mérito es del fotógrafo y la poeta. Si son buenos recuerdos, me alegro.
Ofelia, el placer es mío de leer tu mirada.
Indecisa, muchas, supongo.
giovanni, podrían decirse eso, ¿por qué no?
emege-e, si la emoción es disfrutada, también es compartida.
Gracias por acompañarme y muchos besos.
Leyendo despacito.
ResponderEliminarEs una declaración de amor en toda regla.
Estar donde se desea es una cárcel placentera
Besos
Hola, Isabel. La fotografía me parece muy adecuada al poema, o al revés, no lo sé. Lo que sí sé es que los dos hablan de lo que no se ve, dicen y presentan una cosa para decir otra. Me ha gustado mucho, aunque lo leí cuando lo pusiste y lo he vuelto a releer varios días.
ResponderEliminarUn saludo, Isabel
Luna, estar donde se quiere, o también, por circunstancias, donde se necesita, pero saber que cuando quieras y en el momento que lo decidas puedes tener todos los caminos de la tierra. Yo lo veo más como una declaración de libertad, pero sí, también de amor, tienes razón.
ResponderEliminarBesos
José Luis, me pareció al leerlo que habla de lo que está por venir. Se vislumbra esa luz, el deseo de esa luz, sobre todo cuando, como en la vida, se atraviesan momentos difíciles.
ResponderEliminarComo en el poema de Idea Vilariño:
http://elcosturerodeisabel.blogspot.com/2010/06/142-veces.html
Gracias por volver y un saludo.
Aire en el aire, luz en la luz: consonancias.
ResponderEliminarHermosa pareja.
(Hay, me parece, un "quedo" que se "quedó" sin acento...)
Alfredo, gracias por advertir mi olvido, al copiarlo no puse el acento y como no lo había vuelto a leer bien, no me di cuenta.
ResponderEliminarAhora mismo lo corrijo.
Tanta cárcel construimos a nuestra medida por las inseguridades...
ResponderEliminarBesos
Según iba leyendo, antes de ver la autora, calculaba que eras tú y en tu casa del pueblo. Allí...te ata la luz, te ata el aire, los caminos de puertas afuera se te ofrecen incluso hasta la antigua colonia romana, Munigua...
ResponderEliminar¿No crees?. Eso sí que no se puede aprisionar ¡¡LA IMAGINACION!!
Qué gusto de costurero.Besos.LaUva
Lucía, las inseguridades tienen mucho que ver y el miedo creo.
ResponderEliminarBesos
Uva, ya quisiera yo escribir como Dulce, la poesía me parece el arte más difícil.
Ya ves, es más bien uno de los pueblos de tu querida Alpujarra, pero en realidad, todos los caminos son bellos cuando hay ganas de recorrerlos.
El gusto lo tiene el costurero de recibirte.
Un abrazo.
Hola, bello blog, preciosas entradas, te encontré en un blog común, si te gusta la poesía te invito al mio, será u placer, es
ResponderEliminarhttp://ligerodeequipaje1875.blogspot.com/
muchas gracias, pasa buena tarde,besos.